El pasado 8 de noviembre, el columnista honorífico de diario El Tiempo (Cuenca), Pedro Gutiérrez, envió una carta al subdirector del medio, Marco Navarro, solicitando información sobre la supuesta censura a dos columnas de opinión de su autoría. Los textos fueron enviados en octubre y noviembre de 2019.
La primera, titulada “Dignidad y Resistencia”, debía salir el 9 de octubre en el marco del paro nacional. En el texto, Gutiérrez cuestiona el “cerco mediático”, el Estado de Excepción decretado por el Gobierno y la poca visibilidad de las voces populares en las manifestaciones. El artículo no se publicó.
La segunda columna, con fecha de 6 de noviembre y titulada “Entre vallas”, abordaba la Independencia de Cuenca en el marco de una sesión solemne. En ella se refería al ambiente clasista de ese espacio cultural y recordaba también la represión policial de las protestas violentas en Cuenca. Tampoco fue publicada.
Tras estos hechos, Gutiérrez envió una carta al medio exigiendo una explicación. Fundamedios tuvo acceso al documento en que el ciudadano señala que la libertad de expresión es indispensable para la formación de la opinión pública, citando varios instrumentos internacionales mencionados por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Gutiérrez, quien también es cofundador del colectivo Abusos de Fe, productor y locutor del programa de radio feminista LGBTIQ+ Sin Etiquetas en La Suprema Estación 96.1 FM, explicó en la misiva que una censura previa se inició antes de las manifestaciones de octubre.
“Durante el ejercicio de mi cargo honorífico como columnista, hubo momentos donde existía una censura previa débil, como en el caso de la columna ‘Huracán, ¡Hay María!’ en donde se omitió la sumilla: “Como dice Residente, ‘la furia es lo único que nos une’, tras la situación política del Ecuador, es momento de decir, -Lenín Vete-”.
Fundamedios se contactó con Gutiérrez, quien hasta el 26 de noviembre, aseguró no haber tenido respuesta de diario El Tiempo. Gutiérrez está consciente de que un medio privado tiene la potestad de prescindir de sus columnistas cuando lo considere necesario, pero cree que al tratarse de un medio público las voces deberían ser plurales.
El 14 de noviembre, Fundamedios envió una petición de información a Medios Públicos sobre este caso. El 26 de noviembre se recibió una respuesta suscrita por el gerente general, Luis Eduardo Velarde, en la que explica que el 09 de octubre, fecha en la que debía publicarse la columna, Ecuador estaba en estado de excepción y esta norma da cabida para “suspender el derecho a la libertad de información y establecer la censura previa a los medios de comunicación”.
“La Empresa Pública-Medios de Comunicación del Ecuador E.P. ha dado cumplimiento a la norma y al Estado de Excepción, clasificando los contenidos de las publicaciones, con un sentido de evaluación técnica y profesional evidenciándose que en ningún momento se vulneró derecho alguno (…)”, indica el oficio enviado.
Sin embargo, Fundamedios constató que el Decreto 884 sobre el Estado de Excepción emitido en octubre no resolvió la censura previa, solo limitó el derecho a la libertad de tránsito, libertad de asociación y limita la movilización. M me Respecto al segundo artículo que no fue publicado, Medios Públicos señaló que había algunas imprecisiones en el texto como la afirmación que Gutiérrez hizo respecto a un retiro de 15 millones de dólares a la Universidad de Cuenca, la represión policial que provocó la pérdida de un ojo a dos estudiantes. Además, indicó que el uso de términos peyorativos “atenta contra los principios de un medio de comunicación”.
Gutiérrez aseguró que todo lo que escribió estaba apegado a los hechos que ocurrieron en el momento. Le asombra que se cuestione que en la represión policial dos chicos perdieron los ojos cuando él, en calidad de abogado y como dueño de un estudio jurídico, defiende a uno de los jóvenes heridos.