Ecuador, 8 de octubre. La comunicadora social y activista, Jahaira Urresta, fue víctima de un intento de agresión en su contra, el mediodía del 7 de octubre, mientras se movilizaba con su vehículo en una avenida al sur de Quito.
Urresta relató a Fundamedios que se encontraba junto a su padre transitando a la altura de la Avenida Napo, cuando desde arriba del puente de la Pio XII, alguien le lanzó una roca: “Mi auto estaba pasando y desde las alturas de un puente nos lanzaron una roca grande, contundente. Por suerte el auto estaba en movimiento”.
El pasado 12 de octubre del 2019, en el marco de las protestas por la eliminación del subsidio a los combustibles y mientras se realizaba el cacerolazo en el sector de la Tola, Urresta fue impactada por una bomba lacrimógena en su ojo izquierdo, lo que le provocó su pérdida. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió el pasado martes 14 de enero su informe sobre los hechos acontecidos durante el paro nacional donde recogió el testimonio de Urresta, a raíz de lo cual la joven se convirtió en una activista que denuncia las violaciones a los DD.HH. ocurridas en octubre del 2019.
Ayer se conmemoró un año de la muerte de Marco Otto, uno de los tres jóvenes que cayeron desde el puente de San Roque en el centro de Quito la tarde del lunes 7 de octubre del 2019, durante una persecución policial en la que varios jóvenes quedaron atrapados entre los agentes motorizados y una reja.
Urresta acudió a este homenaje en el cual fue interceptada por miembros de la Policía Nacional que se transportaban en motos y patrulleros y que se acercaron a preguntarle quién era y qué hacía en el lugar. Ella no dio respuesta y permaneció en el sitio durante unos 40 minutos, bajo custodia de la Policía.
La comunicadora social ya alertó del caso a la Defensoría del Pueblo: “Estoy metida en mi casa con mi familia porque temo por mi seguridad y la de mi familia”. Cuenta que desde el martes 29 de octubre del 2019 la intimidación ha sido una herramienta constante que han ejercido contra ella y su familia pues durante la pandemia Aeropolicial ha volado su sector, drones también han sido detectados así como la presencia permanente de vehículos sin placas fuera de su hogar.