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El 27 de agosto de 2013, el Tribunal Primero de Garantías Penales de Esmeraldas declaró la inocencia del periodista Juan Alcívar, corresponsal de diario La Hora en La Concordia, provincia de Esmeraldas, ubicada a 318 kilómetros al noroccidente de Quito. Alcívar fue acusado de “agresión terrorista en contra de funcionarios públicos” por supuestamente haber lanzado una bomba con gas lacrimógeno al interior de un recinto ferial donde se encontraba de visita el presidente Rafael Correa, el pasado 19 de julio de 2010.
El Tribunal de primera instancia declaró la inocencia de Alcívar al no haber encontrado elementos probatorios en su contra. Esto lo resolvió una vez que finalizó la audiencia de juzgamiento que inició el pasado 15 de agosto. Cuatro acusados más fueron declarados inocentes. Sin embargo, la Concejal por el partido Movimiento Popular Democrático (MPD, oposición al Gobierno), Rosaura Bastidas, fue declarada culpable del mismo delito. La sentenciada es, además, es presidenta de la Unión Nacional de Educadores de la misma localidad.
Alcívar dijo a Fundamedios que “ante la falta evidente de elementos de convicción el tribunal declaro mi inocencia. Lo importante de esto es que se evidenció que los propios testigos presentados por la Fiscalía y el Alcalde de La Concordia, Walter Ocampo (quien presentó una acusación particular contra el periodista) fueron quienes demostraron mi inocencia, pues uno de ellos, que en su momento aseveró verme lanzar una bomba lacrimógena al interior del recinto ferial de La Concordia, esta vez lo negó y luego se desmayó y fue trasladado a una casa asistencial” apuntó el periodista.
Anteriormente, Alcívar había denunciado que la acusación que pesaba en su contra respondía a una persecución política por parte del alcalde de La Concordia de quien el periodista admitió haber sido muy crítico cuando trabajaba en la radio El Nuevo Sol .
Igualmente, durante el tiempo en que ha durado su proceso, el periodista afrontó varias agresiones verbales y físicas, amenazas y hasta tuvo que permanecer un tiempo en la clandestinidad porque temía por su vida. En agosto de 2010 el periodista también afrontó una orden de prisión preventiva dictada por el Juez Cuarto de Garantías Penales de Quinindé que se basó en declaraciones de dos empleados municipales de la localidad. Medida que fue levantada un mes después y sustituida por una medida cautelar de presentarse cada 15 días en el Juzgado mientras duró la instrucción fiscal.
Journalist accused of “terrorist aggression” is acquitted.
On August 27, 2013, the First Instance Criminal Court of Esmeraldas acquitted journalist Juan Alcivar, correspondent of Diario La Hora of La Concordia (Esmeraldas). Alcívar was accused of the crime of “terrorism aggression against a public servant”, for supposedly throwing a pepper gas bomb inside a venue where President Rafael Correa was visiting on July 19, 2010.
On August 15, 2013, the Frist Instance Court acquitted Alcivar from the charges due to the lack of evidence against him after a public hearing on the case. Four more people were acquitted as well from the same charges. However, Council member Rosaura Bastidas, from opposition party MPD, was declared guilty of that crime. She is also president of the National Union of Educators of that city.
Alcivar indicated that “the lack of evidence was the reason why I was declared innocent. The important thing is that even the witnesses presented by the Prosecutor´s and Mayor´s offices were the ones that demonstrated I was innocent, due to the inconsistencies in their depositions”.
In the past, Alcívar had denounced that the process against him reflected a political persecution carried out by the Mayor of La Concordia, who had been criticized by Alcívar when the latter worked on El Nuevo Sol radio.
Likewise, the journalist mentioned that while the process lasted he suffered verbal aggressions and threats, to the point that he had to flee the city to protect his life. On August 2010, the journalist was detained as a preemptive measure ordered by the Fourth Criminal Court of Quinindé, based on the declarations of two employees of the City Hall. The measure was dropped a month later and replaced with another measure that ordered Alcívar to present himself at the Court every two weeks.