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El 1 de diciembre de 2015, Twitter bloqueó la cuenta de Stephan Kuffner, corresponsal de The Economist en Ecuador, tras haber publicado una fotografía de personas durmiéndose, en una reunión de la comisión de enmiendas de la Asamblea, por considerar que es información privada y confidencial. Kuffner afirmó que la fotografía por la que le bloquearon el acceso a su cuenta, fue un ‘retweet’ de una fotografía publicada originalmente por el asambleísta de gobierno Miguel Carvajal el 23 de noviembre en donde escribió: “Ciudadanía acude a @AsambleaEcuador, sesión @Enmiendas_EC para apoyar la #enmienda constitucional .
Sin embargo, para que Kuffner pudiera acceder nuevamente a la red social, Twitter le exigía que borre dicha foto. El periodista se negó por considerar que se trata de la imagen de un funcionario público en un lugar público.
Para Kuffner, el haber publicado dicha fotografía era relevante porque mostraba cómo, mientras a unos ciudadanos les negaron el ingreso a dicho diálogo, habían otros dentro que, al parecer, “solo estaban calentando el puesto”. La cuenta de Kuffner fue restablecida al día siguiente, sin que el periodista tuviera que borrar la foto.
Twitter blocks access to journalist’s account and demands photograph should be deleted
On 1 December 2015, Twitter blocked the account of Stephan Kuffner, correspondent for The Economist in Ecuador, after he published a photograph of people falling asleep at a meeting of the amendment commission of the Assembly on the grounds that it was private and confidential information. Kuffner stated that the photograph that led his account to be blocked was a ‘retweet’ of a picture originally published by ruling party assemblyman Miguel Carvajal on 23 November where he wrote: Citizenship comes to @AssemblyEcuador, @Amendments_EC session to support the #constitutional amendment.
However, Twitter demanded that Kuffner should delete the photo to regain access to the social network. The journalist refused on the grounds that it was the image of a public official in a public place.
Kuffner believed the photograph was relevant because it showed how, while some citizens were denied access to the dialogue, others inside were apparently, «just keeping their seats warm». Kuffner’s account was restored the next day without the reporter having to delete the photo.