Con evasivas respondió el Consejo de Regulación de la Comunicación a la solicitud realizada por Fundamedios, el pasado 10 de septiembre, en el sentido de que realice un “exhorto” por la acción de la Secretaría de Comunicación, al haber exigido a Diario El Universo rectificar y pedir disculpas, por considerar que unos tuits incluidos en la nota de ese medio “atentan contra la honra y el buen nombre del Presidente Correa”.
En su respuesta el Consejo de Regulación sostiene que este tipo de reclamos deben tramitarse ante la Superintendencia de Comunicación. No obstante, y tomando en cuenta que este ente aún no existe, se deja a la ciudadanía en una suerte de indefensión ante los posibles atropellos cometidos en violación de la propia Ley de Comunicación.
La comunicación enviada por Fundamedios constituye un llamado para que el Consejo de Regulación se pronuncie, como lo ha hecho en otras ocasiones, sobre un asunto que claramente viola las disposiciones de la Ley Comunicación, como es el hecho de que el Secretario Fernando Alvarado haya exigido a un medio de comunicación rectificarse y pedir disculpas, amparado en una Ley que no lo faculta para ello.
Para no dar trámite a nuestro pedido el Consejo de Regulación, además, señala que el director ejecutivo de Fundamedios, César Ricaurte, es firmante de una demanda de inconstitucionalidad a la Ley de Comunicación y que por eso nuestro pedido debe ser interpretado como: “Que este ciudadano ha optado por reconocer y respetar dicha Ley, ante lo cual manifestamos nuestra satisfacción. De no ser así, es legítimo pensar que esta solicitud solo constituye una petición artificiosa que busca usar a conveniencia la ley y al Consejo con fines ajenos al reclamo de un derecho”.
Antes esta posición del Presidente del Consejo, que simplemente evade conocer una queja ciudadana contra un actor estatal, Fundamedios debe señalar que acudir a esta entidad no implica desconocer las falencias que existen en varios de los artículos de la Ley de Comunicación, ni desistir de los procesos constitucionales que como ciudadano se haya sumado el director de nuestra organización para denunciar las incompatibilidades que tienen esos artículos con la Constitución Nacional.
El hecho de que alguien presente este tipo de reclamos no le hace menos sujeto al mandato de esta Ley, ni titular de menos derechos para activar los procedimientos establecidos en ella. Sostener lo contrario sería sugerir que quienes tienen posiciones contrarias al oficialismo tienen menos derechos fundamentales que el resto de ciudadanos, razonamiento que es inaceptable dentro de un régimen democrático.
Es un deber ciudadano acatar la Ley cuando la misma entra en vigencia, así como es un deber también cuestionar la constitucionalidad de la misma cuando contiene disposiciones que violan flagrantemente los derechos consagrados en la Constitución y los Convenios Internacionales.
Lamentamos que el Consejo de Regulación de la Comunicación e Información se comporte como una dependencia más del aparato de propaganda del Gobierno y ni siquiera intente conocer reclamos ciudadanos contra instancias de poder estatal, que se han convertido en protagonistas esenciales de la comunicación en el Ecuador.
Carta de Fundamedios aquí
Respuesta del Consejo de Regulación aquí