Una cadena de radio y otra de televisión, constantes descalificaciones y acusaciones de autoridades de Gobierno y amenazas de partidarios de este, incluyendo la advertencia de eliminación física a directivos de Fundamedios a través de correos y redes sociales, se han producido tras la audiencia sobre la situación de la libertad de expresión en Ecuador, que se desarrolló el pasado 25 de octubre, ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en Washington y a la que Fundamedios acudió como defensores de derechos humanos junto a víctimas y periodistas.
El hecho más grave se produjo el martes 01 de noviembre, cuando en horario estelar, 20:00, antes de comenzar los noticieros, la Secretaría de Comunicación ordenó la emisión de una cadena de televisión de algo más de 13’18” minutos de duración dónde se hizo falsas imputaciones en contra del Director Ejecutivo de Fundamedios y contra la organización, vinculándolos incluso con personajes a quienes, el gobierno acusa de estar relacionados con crímenes de Estado cometidos en el pasado y con tramas conspirativas en contra de este.
En la cadena se dice que Fundamedios ha evitado referirse a agresiones que han sufrido periodistas ligados al Gobierno y se mencionan diversos casos; todos reportados por Fundamedios en su debida oportunidad en las alertas: No 119 (05 de noviembre de 2010); No 165 (21 de abril de 2010) y No 345 (21 de julio de 2011), que, además, han sido recogidos en informes divulgados públicamente.
Un narrador en off, dice en la cadena “¡No!, de todos estos casos de evidente agresión, ni una sola palabra. César Ricarte calló y Ricaurte se atreve a denunciar al Estado como agresor”, mientras se puede ver una imagen del Director de Fundamedios en blanco y negro, sobre la cual se ha colocado un X sobre sus labios.
En otra cadena de radio emitida el 28 de octubre y que interrumpió el inicio de algunos informativos de la tarde durante 10 minutos y medio, se deslegitimó la actuación de los peticionarios ante la CIDH y se afirmó que en el Ecuador sí existe libertad de expresión.
Parte de esta cadena decía lo siguiente: “… la delegación de periodistas de medios llamados independientes alzaron su voz de protesta porque, según ellos, los intereses a los que representan, este gobierno, es una amenaza a la libertad de expresión…”
En ese espacio de gobierno se cuestionó la intervención de César Ricarte y Mauricio Alarcón, de Fundamedios, por denunciar el deterioro de la libertad de expresión y la falta de independencia de justicia ecuatoriana.“
Además de estas dos cadenas, inmediatamente después de la Audiencia, funcionarios de gobierno se pronunciaron en contra de los peticionarios.
El canciller Ricardo Patiño afirmó, refiriéndose a los peticionarios, que “solo buscan cuidar los intereses de las empresas”; y que estos no son más que “los representantes personales de los dueños de los medios de comunicación que se han dedicado a hacer una campaña permanente contra las acciones del Gobierno. ¿Por qué? Porque sienten afectado sus derechos y eso es lo más importante. Los derechos de los ciudadanos, de vivir bien, les importan un comino”, dijo durante una rueda de prensa.
En esa misma línea Fernando Alvarado, secretario nacional de comunicación aseguró que “el único objetivo que está de trasfondo de defensa en la CIDH no son los derechos de un periodista ni de un medio, son los intereses económicos” y que «si Fundamedios se pronunció en contra de eso, habrá que preguntarse si Fundamedios está con el pueblo ecuatoriano o con el dólar, con el capital».
A esto se suman artículos que descalifican a Fundamedios como el escrito por Xavier Lasso con fecha del 01 de noviembre y bajo el título “Rechazo a Fundamedios”. En uno de sus párrafos dice: “…cuando lo veo de supuesto adalid de la libertad de expresión, no hago otra cosa que girar mi cabeza, derecha-izquierda, sobre mi eje, como expresión de desasosiego, ante tanto cinismo, tanto entreguismo. Nacieron ellos, los de Fundamedios, dizque para defender la libertad de expresión. Hoy, se han sesgado tanto, se han corporativizado, lo hacen sin escrúpulos, solo les va quedando el interés de los dueños de medios, sus patrones”.
Otro escrito firmado por Alexis Ponce, asesor del Ministro del Agua presentado como “Investigación y Análisis de las Nuevas estrategias de desestabilización al Mashi Rafael Correa”, el funcionario público, ex personero de una organización de derechos humanos señala que los peticionarios fueron “stars-system del show mediático en la Comisión Interamericana de la vetusta OEA” y, tras descalificar a los peticionarios, termina por aconsejar al Presidente que: “nuestro Mashi que no tienda la alfombra roja, ni acepte que llegue al país, y cancele la invitación a la conservadora CIDH-OEA…”
Posterior a la Audiencia, las redes sociales fueron un mecanismo que se activo para amenazar y descalificar el trabajo realizado por Fundamedios.
Simpatizantes del presidente Rafael Correa e incluso en el Twitter oficial del movimiento oficialista, Alianza País, publicaron frases, epítetos e insultos como: “sinvergüenzas”; “basura es lo que son”; “lacras lastimeras”; “Fundamedios está diciendo la verdad de esa prensa corrupta”; “prostitutas travestis de la mafia gringa”; “sigan así, será más fácil acabar con pestes como ustedes”; “doble discurso”; “defensores de sus intereses”; “asalariados farsantes…” , por mencionar algunos.
FUNDAMEDIOS rechaza las amenazas y falsas imputaciones descritas, por el único hecho de haber comparecido ante el máximo organismo continental de protección de derechos humanos para denunciar las severas y gravísimas limitaciones a la libertad de expresión en el Ecuador. Hacemos notar que con la reacción del Gobierno se evidencia que, todo lo planteado ante la CIDH por los peticionarios se confirma como real.
Además, señalamos que en la campaña de amenazas y descrédito se cae en diversas ilegalidades como es el incumplimento del Art- 63 de la CIDH sobre la protección que están obligados a brindar los Estados a quienes acuden ante ese organismo. Además, se hace uso político de documentos entregados al Servicio de Rentas Internas, solo con fines tributarios, violando los principios de protección de datos.
Pero, Fundamedios rechaza con toda firmeza, por ser falsas y maliciosas, el intento de vincularnos con personajes que según el Gobierno están conectados con crímenes de Estado o conspiraciones. Está gravísima acusación del Gobierno ecuatoriano es realizada sin ninguna prueba y declaramos que ningún directivo, funcionario o colaborador de Fundamedios conoce, se ha relacionado o tiene alguna vinculación con personajes de pasado obscuro como señaló la cadena de gobierno.