Alfredo Pinoargote fue uno de aquellos cuya huella será eterna en el periodismo ecuatoriano. Nació el 27 de julio de 1945, en Esmeraldas, y tenía 10 años cuando su vocación salió a flote. Mientras cursaba el quinto grado redactó una composición en la que criticó al Alcalde de su ciudad en ese entonces. La composición cuestionaba la falta de pavimentación en las calles.
Mientras estudiaba jurisprudencia en la Universidad Católica de Guayaquil solicitó escribir artículos en El Universo. Le pidieron tres artículos de prueba, pero él envió cuatro; y, luego de una semana, todos sus artículos fueron publicados. Es entonces, cuando a sus 23 años apareció en las columnas de opinión del diario El Universo.
Pinoargote fue editor general y columnista de la revista Vistazo, donde colaboró desde 1978 con sus artículos políticos. Aunque, también desarrolló su trayectoria en la función pública, al desempeñarse como embajador en la Unión Europea y en las Naciones Unidas en Ginebra.
En 2003, llegó al ‘canal del cerro’, como se conoce a Ecuavisa. Allí tuvo su espacio de opinión, llamado Detrás de la noticia, el cual presentaba y dirigía. Desde 2009 formó parte del programa de opinión Contacto Directo, donde la conducción y dirección estaban a su cargo.
Entre los ochenta y los noventa Pinoargote apareció en pantalla como invitado a programas de opinión o en entrevistas a candidatos para elecciones, como detalla en una entrevista en El Universo.
“Soy frontal y agresivo, y creo que en Ecuador realmente existe libertad de expresión”, manifestó cuando asumió el reto de ser parte del programa Contacto Directo. Tenía conocimientos en comercio exterior, manejo de la legislación constitucional y memoria histórica, señala una reseña de Ecuavisa. Sus conocimientos le permitieron estar siempre a tono con la coyuntura nacional.
Con un estilo directo, en el cual combinaba información y opinión, compartió la pantalla con sus compañeros Estéfani Espín y Lenin Artieda, en Contacto Directo. Desde 2020, emitió extractos de opinión de los hechos más relevantes del acontecer nacional para su programa.
Cuando presentaba comenzaba con un saludo a su compañera de pantalla, para luego emitir un comentario sobre el contexto nacional y, así, iniciaba con el espacio de entrevistas.
Su compañera de vida fue Margarita Quiroz, con quien tuvo tres hijos, llamados Carla, Paola y Alfredo Pinoargote Quiroz. Su esposa, lamentablemente, falleció en 2018 y su hijo Alfredo es licenciado en periodismo internacional, y trabaja en el mismo canal en el que se dio parte de la trayectoria de su padre. Estricto, perfeccionista, talentoso y un maestro es como sus compañeros de trabajo recordarán por siempre a Alfredo Pinoargote.