Los ataques provenientes del crimen organizado en contra medios de comunicación y periodistas tomaron fuerza este mes y obligaron al Estado, con presión de la sociedad civil, a la adopción de acciones para proteger el trabajo periodístico.
Entre los casos más graves de este mes está el atentado contra el canal privado de televisión RTS. A la 01:20 de la madrugada de 7 de octubre dos sujetos que se transportaban a bordo de una motocicleta circundaron el canal, uno de ellos se bajó y lanzó tres balazos contra uno de los portones de la estación televisiva y dejaron panfletos en los cuales advertían que está prohibida la circulación del diario Extra. Además, amenazaron directamente a su director nacional.
En el panfleto que dejaron los atacantes, se lee: «Se les comunica que, a partir de hoy, jueves 7 de octubre, a las agencias y a todos los periodiqueros de Esmeraldas, Guayaquil, Machala y Cuenca, está prohibida la venta del diario La Extra». El panfleto incluye una amenaza contra las personas que venden el diario Extra, uno de los de mayor circulación a nivel nacional: «El periodiquero que no acate estás órdenes, sea quien sea, se le da de baja o, más claro, se le va a matar, debido a la corrupción y malicia que tienen para malinformar a ciudadanía este diario desde Guayaquil, que se vende a mejor postor». El documento termina con una amenaza de muerte contra el director, con letras mayúsculas: «Muerte o muerte para el director nacional de La Extra, que de dónde te escondas te vamos a encontrar (Sic.)».
Ante estos hechos, la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia de la República emitió un comunicado de rechazo a estos ataques y la Fiscalía General del Estado inició una investigación de oficio.
Se registraron más casos. Durante la madrugada del 5 de octubre, un desconocido se acercó a la camioneta del periodista Sammy Nájera Benavides, locutor de la Radio Guaranda y director del programa de opinión Voz del Pueblo y le prendió fuego. En un video publicado en redes sociales se observa cómo un hombre llevaba en sus manos dos garrafones de gasolina y se acercó al vehículo del periodista y le lanzó el líquido inflamable; acto seguido, le prendió fuego.
A esto se suma que en Guayaquil ya se han creado desiertos periodísticos, como Socio Vivienda II, a los cuales los periodistas no pueden ingresar, ni siquiera con resguardo policial, por temor a ataques desde bandas delictivas que controlan el sector. Incluso se han registrado intentos de asalto en vivo, como del que fue víctima el equipo de Teleamazonas, en las afueras del Estadio Monumental.
Las cifras de octubre
En octubre de 2022 se produjeron 15 agresiones contra periodistas, medios de comunicación y ciudadanos, que afectaron el derecho de libertad de expresión, prensa y acceso a la información en Ecuador. Entre 2007 y octubre de 2022, Fundamedios ha contabilizado un total de 3361 agresiones contra la prensa.
En total, 18 periodistas, tres medios de comunicación y una organización de la sociedad civil fueron agredidos. Los actores No Estatales fueron los principales agresores, en 11 ocasiones, y el Estado en cuatro ocasiones.
Asimismo, se registraron cuatro casos de Discurso Estigmatizante; cuatro Agresiones Físicas; dos Amenazas; dos Atentados y otros casos de Agresión Verbal, Amedrentamiento y una restricción de Acceso a la Información.
El análisis geográfico reflejó que en Pichincha se registraron seis agresiones; cinco en Guayas y una en Sucumbíos, Pastaza, El Oro y Bolívar, respectivamente.
Otras tendencias
El correísmo y sus aliados volvieron a atacar a periodistas
El expresidente Rafael Correa, sentenciado por corrupción, prófugo de la justicia y refugiado en Bélgica, utilizó su cuenta de Twitter para atacar a periodistas y desencadenar más agresiones en redes sociales desde fanáticos y cuentas de trolls.
La periodista Carla Maldonado recibió una amenaza directa del expresidente: “Más temprano que tarde esta nefasta «periodista» tendrá que responder por todos los bienes públicos perdidos por su ineptitud y mala fe”, escribió el exmandatario en un tuit, junto al hashtag #LosCorruptosSiempreFueronEllos.
Fundamedios realizó una alerta en defensa de la periodista por lo que también fue atacado: El portal político Ruta Krítica, alineado con el correísmo y que tiene como uno de sus administradores al funcionario de la Prefectura de Pichincha Orlando Pérez, atacó al periodista César Ricaurte y a la organización.
A través de un mensaje de Twitter, el portal aseguró que Ricaurte es empleado de la National Endwomemt for Democracy (NED) de Estados Unidos, lo tachó de ‘supuesto periodista’ y aseguró que es el “jefe de la mafia mediática”, al referirse a Fundamedios, que lucha por la libertad de expresión, y añadieron que, junto a la periodista Carla Maldonado, “no hacen más el ridículo porque les falta algo de ‘aceite’ de cierta embajada”.
Otra de las agredidas fue la periodista Silrat Traslaviña, de Majestad FM, quien recibió una serie de insultos, descalificaciones y ataques misóginos luego de que Correa respondió a un comentario suyo en la red social Twitter. En cambio, el periodista Andersson Boscán fue víctima de insultos xenófobos y descalificativos tras una opinión que dió sobre un vídeo realizado por personas afines al correísmo, quienes defendían una obra nunca ejecutada por Correa: la Refinería del Pacífico: «Boscán es un buen ejemplo de la decadencia del país. Un extranjero ignorante y mala fé, cuyas limitaciones, en lugar de darle vergüenza, le dan palestra», dijo el exmandatario.
Desde el Estado se produjeron varias agresiones
Varios funcionarios públicos agredieron a periodistas este mes. Durante la cobertura de la nueva masacre carcelaria ocurrida el 6 de octubre dentro de la Penitenciaría del Litoral —ubicada en la provincia ecuatoriana de Guayas— la Policía Nacional protagonizó varias agresiones físicas contra equipos de prensa y defensores de Derechos Humanos. El periodista Charlie Piza y el camarógrafo Efrén Flores, de RTS; el periodista de El Universo Andres Bajaña; el camarógrafo Vicente Vargas, de Teleamazonas; y los activistas Billy Navarrete y Vivian Cartagena, fueron afectados.
El 17 de octubre el periodista de Ecuavisa Hernán Higuera fue víctima de un intento de desalojo de un espacio público, por parte de funcionarios públicos de la Secretaría Técnica de Gestión Inmobiliaria (Inmobiliar EC), antes de realizar una entrevista. Higuera contó que iba a realizar la entrevista cuando llegaron dos guardias de seguridad —con radios y toletes— a decirles que no tenían autorización para hacer una entrevista en ese espacio.
Mientras que el 24 de octubre el periodista Yixson Ordóñez Bonilla, de la plataforma digital Sucumbios al Día, fue empujado en dos ocasiones por servidores públicos del Municipio de Lago Agrio, quienes impidieron así que se acercara al alcalde, Abraham Freire Paz, para entrevistarlo.
¿Un peligroso discurso presidencial?
El presidente, Guillermo Lasso, otorgó la noche del 12 de octubre una entrevista llena de interrupciones y descalificativos a su entrevistador, Carlos Vera, y cuestionamientos a la prensa ecuatoriana, a la que acusó de querer arrinconar a su Gobierno.
Durante dos horas, Lasso calificó varias veces a Vera de insidioso: “¡Qué insidioso es usted, siga con la insidia!”, “El Ecuador de las oportunidades es aquel de los temas de los que normalmente usted no quiere hablar”, “no sea insidioso», fueron algunas de las frases que repitió; e incluso aseguró que Vera “apuesta siempre al fracaso del Ecuador”. “Usted tampoco sabe nada”, agregó.
El primer mandatario criticó a diario El Universo y una nota que informaba sobre la falta de paracetamol en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social en Guayaquil: “Esta es la típica noticia de los medios de comunicación, escandalizar, pretenden arrinconar al Gobierno y al Presidente de la República, pero no informan el nuevo sistema de entrega de medicina en los cuales se ha atendido 80 mil recetas”.
Sobre el mismo medio de comunicación y una noticia relacionada con problemas en Migración en Guayaquil, Lasso aseguró que en 20 minutos fue resuelto después de leer el rotativo: “Pero (el medio) no publicó que ya se resolvió el problema”.
Entre otras cosas, aseguró que existen dos visiones del país: “El Ecuador que mira la prensa y el Ecuador que miran los ecuatorianos”.