Desde julio de este año, los términos “30S”, “30-S” y “Prohibido olvidar” son de propiedad exclusiva del Gobierno, después de que el Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual (IEPI) aceptó -en su Gaceta No 560- el registro de estas frases, hasta mayo de 2022.
Sin embargo, antes de que esto suceda, los ciudadanos ecuatorianos fueron los primeros en utilizar el término de “30S” como un hashtag (identificativo) en la red social Twitter, para contar los hechos del 30 de septiembre de 2010.En esa fecha se produjo una revuelta policial que fue calificada como intento de golpe de Estado por parte del oficialismo y en la que la información era limitada, pues se ordenó una cadena oficial indefinida que transmitía solo una versión de los acontecimientos.
En ese entonces, fue el usuario de Twitter Eduardo Arcos (@earcos) el primero en proponer “#30S como hashtag corto para identificar lo que pasa en #Ecuador”, según lo cuenta él mismo en su blog personal, por ser “una forma sencilla” de agrupar todos los tuits y noticias de lo que ocurría en esos momentos, tal y como se hizo con acontecimientos históricos internacionales como el 11-S y el 11-M, que recuerdan los trágicos episodios en Estados Unidos y España.
Dos años después de los mencionados hechos y tras la popularización del término “30S” no están claros los alcances e implicaciones legales que tiene la utilización de las frases registradas por el Gobierno, pues hay medios y usuarios en redes sociales que continúan empleando estos términos sin reparos y otros que, por el contrario, prefieren no utilizarlos, pese a que se refieren al tema.
De acuerdo a un comunicado oficial del IEPI, los términos patentados por el Gobierno “forman parte del patrimonio del Estado y fueron solicitados para identificar servicios o campañas especificas”. También citan la Ley de Propiedad intelectual que en su artículo 218 expresamente dispone que “mientras sea de buena fe y no constituya un uso que lesione este derecho, cualquier persona puede hacer uso de la expresión (este uso de buena fe es cuando no ocasiona confusión, asociación o engaño en el público consumidor)”.
Si bien 30S, 30-S y Prohibido Olvidar están registradas dentro de la clase 35, referente a la publicidad, gestión de negocios o administración comercial, el abogado Nicolás Solines -experto en temas de propiedad industrial e intelectual en Solines & Asociados-comenta que esta clase no solo comprende las categorías enunciadas arriba, sino que existen otros servicios registrados dentro de esta como publicidad, que va desde la callejera hasta la radiofónica o televisada, así como servicios de comunicados de prensa.
“Como no está bien delimitado qué casos podrían ser susceptibles a una sanción, o cuándo se podría entender un uso ilícito de las marcas, se puede generar temor que llevaría a que los medios de comunicación, o incluso la gente, no utilicen estos distintivos”.
Según Solines, las penas por un uso ilícito de estos símbolos podrían ser de hasta tres años en prisión, lo que haría que cualquier persona piense dos veces antes de referirse a los acontecimientos ocurridos ese 30 de septiembre de manera abreviada.
Al respecto, la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha establecido que, en ciertos casos, las multas económicas pueden ser aún más inhibitorias que las penales, pues ponen en riesgo no solo el patrimonio del comunicador, sino que potencialmente afectan al proyecto de vida de toda su familia.
A pesar del temor que podría generar el uso de estas marcas, Solines asegura que en términos generales, los medios las deberían utilizar libremente siempre y cuando sea con fines estrictamente informativos, pues “el uso que le dan los medios no llevaría, ni debería acarrear sanción alguna”, al tratarse de términos que se refieren a un acontecimiento histórico importante y que es, además, de uso común.
Para este abogado, el hecho de que una persona haga alusión a una fecha de relevancia histórica no puede motivar una sanción jurídica. Sin embargo, según su criterio, hay que tomar en cuenta que podría existir el riesgo de que el Gobierno-valiéndose de las protecciones que tienen los servicios registrados- sancione a algún medio que les resulte incómodo como una manera de intimidación o presión.
El abogado Flavio Arosemena, especialista en temas de propiedad intelectual, considera que se ha generado un temor injustificado respecto a estos registros, el que cree se ha dado por desconocimiento en materia de derecho de marca, pues asegura que estos solo sirven para prohibir usos comerciales o usos que puedan generar confusión en las personas.
“No veo cómo pueda afectarse la libertad de expresión, pues el mencionarlos en algún artículo o debate no es un uso comercial, salvo que un medio los utilice en algún logo o como identificador para una sección. Eso sí sería un uso comercial que acarrearía sanciones”, apunta Arosemena.
Por su parte, el tuitero Eduardo Arcos cree que “pretender el control de un término que fue concebido y por lo tanto pertenece a la sociedad, aunque sea con buenas intenciones, traiciona la confianza que el Gobierno debería tener sobre sus ciudadanos y sienta un precedente bastante negativo: si queremos usar ciertos términos, primero tenemos que estar alineados a los intereses del Gobierno. Eso es un acto poco democrático, es atentar contra la libertad de expresión, es una especie de ataque preventivo contra cosas que no han sucedido aún, es arreglar un problema que aún no existe”, afirma en su blog.
Medios de comunicación y cibernautas continúan utilizando las frases del Gobierno
En un monitoreo realizado entre el 27 de septiembre y el 1 de octubre de 2012, tanto a medios de comunicación privados como a los del Gobierno, así como en redes sociales, se evidencia el uso de las frases que hoy son de propiedad del Estado.
Por ejemplo, en las notas publicadas por diario Hoy se constató que la frase “30S” es utilizada en la sección de Opinión para titular artículos como el difundido un día después del segundo aniversario de los hechos, “30-S: acción de la justicia y reforma policial aún esperan”; así como en el cuerpo de la noticia: “Correa recuerda a quienes defendieron la democracia de manos de „golpistas‟”.
Por su lado, diario El Comercio decidió utilizar el término “30-S” para titular algunas de las notas sobre la sublevación policial, por ejemplo: “La cúpula policial que llegó tras el 30-S trata de apuntalar la reforma”, “Con una vigilia se conmemora en Quito el 30-S” o “Dos años después del 30-S, la Policía trata de recuperar su credibilidad”.
No obstante, tales términos no fueron utilizados dentro de dichas informaciones.
En diario La Hora también se evidencia su uso en las noticias tituladas:“Coronel Tapia denuncia a director de la cárcel 4”, dentro de su contenido, o “Soy trofeo del 30-S” y “FF.AA aún no entrega datos del 30-S a la Fiscalía”. En todas ellas, se recurre al término “30-S” en paréntesis después de 30 de septiembre, como siglas de la fecha. Sin embargo, un articulista de ese medio tiene más cuidado en no mencionar dichas frases, como lo hace Miguel Molina Díaz en su editorial denominado “A dos años del negro día 30”.
Los diarios del Gobierno, como El Telégrafo y El Ciudadano, también utilizan dichas expresiones, tanto en noticias como en columnas de opinión. Por ejemplo, en El
Telégrafo se puede leer“30-S” tanto en subtítulos, como en el contenido informativo del medio, mientras que en El Ciudadano se traen a colación dichas frases tanto en sus títulos como en el contenido de las mismas, tal y como se ve en las notas tituladas: “Presidente recuerda a las víctimas del 30S y agradece al pueblo” y “Miles de ciudadanos defendieron la democracia el 30S”.
Por su parte, diario El Universo no ha utilizado las “marcas” patentadas por la Revolución Ciudadana, pese a que en titulares como “Gobierno desaceleró su plan de cambios en la Policía tras revuelta” o “Procesos judiciales por 30 de septiembre, a ritmos distintos” sí tratan el tema, a propósito del aniversario de dicha fecha.
En las redes sociales sucede algo similar y los usuarios siguen utilizando el distintivo 30S y 30-S para comentar o referirse a esta fecha histórica. No obstante, hay usuarios que han preferido modificar el distintivo con una minúscula, como 30s, o utilizar la fecha completa.
También se puede ver en la red social Twitter que hay usuarios de Francia que utilizan el mismo distintivo registrado por el Gobierno para referirse a la Manifestación contra el Pacto Presupuestario en ese país.
En cuanto a “Prohibido olvidar”, esta frase no ha sido utilizada en ninguna de las noticias monitoreadas.